Manel Kape critica su derrota ante Muhammad Mokaev en UFC 304.
Si bien se podría argumentar que Kape potencialmente merecía una victoria por decisión sobre Mokaev en una pelea de tres asaltos que transcurrió sin incidentes, su problema no es con los jueces, sino con una sumisión que aplicó mientras defendía un derribo. En dos videos publicados en Twitter el lunes, Kape mostró su intento de sumisión mientras afirmaba que Mokaev hizo tapping pero el árbitro no lo silbó.
“Se puede ver claramente cuando Mokaev golpea”, escribió Kape. “Antes de la pelea, el mismo árbitro nos advirtió que cualquier manipulación del tap o juego sucio terminaría la pelea o nos quitaría el punto. Pero ?? #taporfaketapitstap »
Se puede ver claramente el momento en que Mokaev Tap ✋.
Antes de la pelea, el mismo árbitro nos advirtió que cualquier manipulación de toques o jugadas sucias resultaría en el final de la pelea o la retirada del punto. Pero ?? #taporfaketapitstap ✋ pic.twitter.com/uW1XS72a2C
– Por Manel Kape (@ManelKape) 29 de julio de 2024
Mokaev finalmente logró escapar de su posición y mantuvo el control desde arriba.
La evidencia en video no parece concluyente, pero Kape puede tener un mejor argumento: Mokaev merecía que se le dedujera un punto de otro intento de derribo al principio de la pelea.
Después de que Mokaev derribó a Kape al suelo, este último se aferró a los pantalones cortos para asegurar la posición, lo que llevó al árbitro Mike Beltran a detener la acción. Beltrán reprendió a Mokaev por el movimiento y le quitó la posición, pero no castigó al peleador de 23 años por el error.
Al final, Mokaev obtuvo una victoria por decisión unánime para mejorar a 7-0 en UFC.
Es una apuesta segura que Kape nunca tendrá la oportunidad de vengar esta derrota, ya que los funcionarios de UFC anunciaron que Mokaev no sería reintegrado al roster después de la pelea. UFC 304 fue la pelea final del contrato de Mokaev, y el CEO de UFC, Dana White, dejó en claro después del evento que la compañía no tenía interés en traer de regreso a Mokaev.
La salida de Mokaev de UFC fue precedida por una semana difícil en Manchester después de que el invicto peleador de 23 años admitiera abiertamente haberle pedido a Kape una foto juntos antes de desatar un puñetazo que provocó una pelea en el hotel anfitrión antes de UFC 304.