La fría respuesta de Mike Tyson a un regalo de Jake Paul ha conmocionado a los fanáticos del boxeo.
El viernes 15 de noviembre, “el hombre más malo del planeta” regresará al ring de boxeo para su primera pelea profesional en casi 20 años. Emanando del estadio AT&T con capacidad para 80.000 personas en Arlington, Texas, “Iron” se enfrentará a Jake Paul en una pelea que se espera sea uno de los eventos de deportes de combate más vistos de todos los tiempos.
Apenas unos días antes de su épico encuentro, Tyson y Paul se encontraron cara a cara y no hace falta decir que las cosas se pusieron un poco intensas entre los dos.
Tratando de aligerar un poco el ambiente, Paul le regaló a Tyson una paloma, un pájaro que el legendario púgil amaba desde su infancia en Brooklyn.
“Esto parece un pedigrí de bajo presupuesto”, dijo Tyson mientras manipulaba la paloma. “Se lo voy a dar de comer a mi halcón” (h/t talkSPORT).
La fría respuesta de Tyson provocó conmoción entre los comentaristas en línea.
“Mike desde muy joven siempre ha cuidado de sus palomas, por lo que este comentario de Mike ahora significa buenas noches para Jake”, escribió un usuario en respuesta.
“No está de humor para hacer amigos”, añadió otro.
“Pobre paloma”, dijo un tercero. “Me conmovió ver la paloma y saber que estaría muerta en cualquier momento”.
La larga historia de Mike Tyson con las palomas
Tyson ha tenido palomas como mascotas desde que tenía nueve años. En el libro IRON AMBITION: My Life with Cus D’Amato, Tyson reveló que las palomas eran un escape del bullying que sufrió cuando era niño debido al sobrepeso. Amaba tanto a los pájaros que la primera pelea en la que se metió fue por uno de ellos.
“Mi primera pelea ocurrió por accidente”, recuerda Tyson en el libro. “Había usado parte de mi dinero para comprar mis propias palomas. Los guardé en un edificio abandonado al lado del mío. Este tipo robó uno de mis pájaros y cuando lo enfrenté para recuperarlo, lo sacó de su abrigo, le torció el cuello y me frotó la sangre.
“Estaba furiosa pero tenía miedo de pelear hasta que uno de mis amigos me empujó. “Tienes que luchar contra ello, Mike”. Entonces giré a la derecha y él cayó y quedé atónito. No sabía qué hacer. Entonces me di cuenta de lo genial que me veía haciendo el movimiento aleatorio de Ali, así que comencé a hacerlo y todos empezaron a aplaudir. Mi primera muestra de aplausos.